miércoles, 20 de julio de 2016

Esta (no) es mi historia: Carta a Papá

Son casi diez años ya...


¡Hola papá! ¿Cómo te ha ido? A mi bien...
Hacía tiempo de la última vez que hablé contigo ya que siempre que te veo, las palabras se quedan atrás y sólo me queda abrazarte.
¿Mi mamá?, ahí anda, con sus achaques, pero levantando no le queda otra. La trato de ayudar en lo que pueda pero a veces no me da el tiempo o las ganas para apoyarla. Sigue costureando, pero cada vez menos. Tiene un grupo de amigas con las que aprendió a pintar lo que la tiene muy contenta así que creo que estarás feliz con ella.
¿La Camila? Grande, linda… Si la vieras, te daría gusto. Ya lee, escribe, tiene mejores amigas y ya está pensando en ser bailarina. Aprende rápido, supongo que viene de familia, pero es mucho mas independiente que yo. Apuesto que tu andas por ahí viéndola de vez en cuando para ver sus logros, lo que si, yo no soy de las que cuelgan las notas enmarcadas, así que quedan guardadas para el futuro (son buenas). Es ordenada y mañosa, pero está bien, se ve feliz y es super cariñosa, te manda un abrazo.


Bueno, antes de seguir escribiendo te deseo un muy muy feliz cumpleaños número 86 *soplas las velitas*. No voy a poder ir a verte eso si, sino hasta el fin de semana porque me toca trabajar y partir a ver a mi mamá, pero no importa porque sé que sabes que me he estado acordando todo el día.


La verdad es que hace tiempo que quería contarte muchas cosas:


Me imagino que te enteraste que Pipo ya tiene dos hijos. Ambos grandes, ambos fuertes, ambos cariñosos. Ya te veo sentado en el sillón jugando con los tres (porque Camila también andaría por ahí) o mejor aún, tirado en el suelo, total entre todos te levantamos. Él tambien está bien, anda por ahí carpintereando pero tranquilo y feliz con eso para poder sostener a su familia tal cual le enseñaste, estarías con el pecho inflado. Lo que si, anda a verlo, creo que necesita a alguien en quien apoyarse a veces...


Mis tías están bien, cada día más viejitas, una más sorda, la otra más agachada pero ahí caminan. Ya no te pelan tanto, de hecho todo lo que se pueda decir es agradable, me han contado hartas cosas.
Marcelo tiene un buen trabajo pero la verdad es que no se mucho sobre su vida, hace tiempo ya que peleamos y no estoy muy interesada en retomar esa línea, pero su hija… uff, esa niña está más alta que yo, ya en enseñanza media y preocupada de un montón de cosas, trato de conversar con ella de vez en cuando por si necesita algo.


¿Yo? Bueno, te conté que me fui de la casa porque tenía el alma agotada de paciencia y todo mejoró. El primer departamento fue un desastre, pero ahora es maravilloso. Cabe mucha gente, por fín podré celebrar navidades como las de antes o al menos eso espero. Me titulé hace un tiempo ya, creo que te vi por ahí al fondo, orgulloso de lo logrado. Tengo un trabajo muy bueno, de hecho, mejor de lo que uno puede esperar. He conocido un montón de gente en el camino que me han ayudado a seguir adelante y me sacan de la angustia cuando lo necesito. Ya llevo hartos años con mi pareja, es como tú por lo que me han dicho así que podría caerte bien, he ido a verte con él así que ya lo conoces.


Que más… ostras, son tantas cosas y tan pocas palabras… Ah sí, creo que te habrás reunido por ahí con un montón de gente, sobre todo amigas de mi vieja así que todos te habrán contado muchas cosas y se habrán tomado un café contigo antes de seguir a su camino a su destino final. Espero también, no en verdad no lo espero, estoy segura de que los guiaste para que no se perdieran. Hace muy poco se fueron para allá personas que queríamos mucho, las lloramos harto, pero estamos más tranquilas ahora.


Bueno, no tengo mucho mas que decir ahora, cuando vayan pasando las cosas, ten por seguro que te estaré contando todo, te pediré ayuda cuando lo necesite y te daré las gracias cuando me resulten las cosas. Te echo de menos, date una vuelta más seguido para saber si estás bien.


Un beso grande en la frente y mucho amor para tí.


Tu hija, Carolina.

martes, 12 de julio de 2016

Diario de una Mamá Independiente EE: Perder y seguir

Cuando uno es chico, se pasea por las casas de sus amigos de manera como si fuera la suya propia. Las “tías” y los “tíos” se hacen familia igual que tus amigos. Esas personas pasan a ser parte importante de tu vida y las quieres como a tus papás.
Pues bien, esta entrada va dedicada a una de esas amigas/hermanas y la tía/mama...


Mi primer encuentro cercano con la muerte del que tengo memoria fue un julio hace muchos años atrás cuando murió mi tío. Un señor al que alcancé a conocer por chiripa, el único hombre en heredar el apellido de mis abuelos maternos, pero que me resultó bastante agradable. Lo fui a ver al hospital un día y al día siguiente ya no estaba. Le avisaron a mi madre cuando yo aún dormía con ella asi que tiene que ser hace MUCHO tiempo atrás.
El teléfono sonó como a las cuatro de la mañana y mi mamá solo lloraba y decía “ya”. Era una pena indescriptible, esa que se traspasa aunque no entiendas lo que está pasando, esa que no tienes palabras. Yo veía a mi mamá y me daba pena pero no por ella, sino que porque estaba esa pena. Esperé no sentir nunca esa pena.
Con el tiempo, fueron yéndose muchas personas, amigas de la familia sobre todo (para el que no sepa, yo tengo una familia anciana) pero cuando tenía 16 años, me tocó a mi. Cambió mi manera de ser, mi manera de pensar, mi manera de ver las cosas. El mundo se abrió a mis pies y caí en un vacío profundo durante mucho tiempo. Pude experimentar algo parecido y quizá peor que lo que mi madre vivió ese día….


Mi papá era uno de los pedestales más importantes en la vida. Era el que me cuidaba de cualquier problema, de cualquier drama, de cualquier angustia. El sonreía y todo iba mejor. Él peleaba por mí, hacía bromas pesadas pero con cariño, formó una base importante en mi educación gracias a la cual soy quien soy ahora. Pero por sobre todo, era la persona que decía “Dale, yo te ayudo”, “Dale, yo te apoyo”, que me animaba a seguir adelante con las cosas, con lo que yo quisiera hacer. Si no resultaba, lo intentaba con otra cosa y ahí estaba él.
Un nueve de octubre su corazón se apagó. Era tan grande, que no dió más. En serio, literalmente hablando, a mi papá le creció mucho el corazón por tratar de bombear en un cuerpo de arterias tapadas por el cigarro consumido en la adultez y la diabetes de la vejez. Un par de meses más y hubiera explotado.
Lo lloré en el minuto, pero después no pude seguir llorando mientras duró el proceso. Me fui de gira de estudios, me concentré en otras cosas y no hubo tanta lágrima.


Ese fue un error.


No llorar antes, me hace llorar hoy, me hace llorar ahora. Me hace lamentar un montón de cosas que no hice, cosas que hice, cosas que dije, cosas que no dije… Chicos por favor, si alguien pierde a un ser amado NO LES DIGAN QUE ESTÉN TRANQUILOS.
Déjenlos llorar, que expresen su pena, su dolor del modo que a ellos les plazca. Si los ven de pie como un tronco, un apretón en el brazo, una sonrisa, basta para que sepa que no está solo, y eso también es muy importante, esa persona sabrá que cuenta con un hombro si lo necesita. Si los ven tirados en el suelo, consuélenlos, quizá también lloren ustedes, pero qué más da, están apoyando a alguien que quieren. Si quieren estar solos, denle su espacio, ya se acercará con el tiempo si los necesita. Evalúen la situación, pero no les pidan que no se expresen...


Yo estaba chica en ese entonces, no lo entendía, quizá también estaba en shock y eso dura mucho tiempo. Debo agradecer todo el apoyo que tuve en ese momento, de mis amigas de la vida, de quienes me acompañaron, de quienes me tiraban para arriba. Nunca lo dije, pero gracias, de verdad gracias.


Puedo decir que lo superé pero sería mentira. Uno vive con esa pena guardada y cuando tiene que salir por melancolía, por sentimiento, por un buen recuerdo, es normal. Disculpen, pero es la verdad y no tienen porqué sentirse mal, ni sentirse tontos por tener pena en el alma y menos por sacarla a relucir.
Claro, no estoy diciendo que se pasen la vida llorando como Magdalenas o que pase como en las comedias donde están en un grupo grande y de repente se chantan a llorar después de unos meses de duelo. Pero al inicio es cuando tienen la oportunidad, cuando pueden liberar todo eso, cuando pueden decir todo eso que tienen que decir…


Para los otros que aún no han perdido a sus seres especiales. Puede sonar cliché, pero no se olviden NUNCA de decirles cuánto los aman. De ir a verlos, de hacer una llamada solo para saber cómo están, de llevarles un engañito. Nadie está libre de las cosas, estos últimos meses me ha quedado más que claro.


¿Y que están haciendo aquí? Déjense de leer y partieron. Un mensaje o una visita siempre son bienvenidos…

Nos leemos luego

viernes, 13 de mayo de 2016

Diario de Una Mamá Independiente VI: Trabajo Pt. 3

Top tres:


Continuando con el top tres de mis trabajos que marcaron mi existencia, tenemos a esta empresa que resulta un recuerdo muy especial y muy bello:



Como ya he dicho en incontables ocasiones (aunque en este blog sólo un par) me encanta el tema audiovisual.
Cuando entré en la universidaT, ya como madre soltera, sin dinero, pedí lo que conocemos como Crédito Universitario. Las instrucciones que yo leí fueron “Ingresa aquí el monto de la cuota a pagar” y yo puse veinte lucas… Grande es mi sorpresa cuando me otorgan un miserable crédito de veinte lucas. Fui a reclamar y entre que pensaron que era la weona mas grande, que ya se había pasado el tiempo de reclamar (porque se supone que uno podía reclamar en un período de tiempo no informado y que curiosamente justo pasó el día que me dieron la cuota del crédito) y que mi querida madrecita había ido a llorar para que nos rebajaran la cuota, tuvimos que pagar un año completo la cuota completa, por lo que me vi ABSOLUTAMENTE obligada a conseguir trabajo.
Tiré un solo currículum y fue en Blockbuster, antiguamente ubicado cerca de mi casa, ahora ya no existe porque quebró.
Me llamaron, parece, al día siguiente. Me entrevistó un uruguasho simpaticón que no creo que me esté leyendo y me dijo “cuando podés empezar? ¿mañana? ya dale, nos vemos mañana entonces ahí arreglamos los papeles”... Batí el record a la conseguida de pega más rápida de la historia. Lo adorable fue que antes de entrar ahí, me encontré con el mismo chiqui lindo que me recibió el curriculum en Cinemark. Fue un lindo reencuentro.
Ahí aprendí muchas cosas, conocí mucha gente, etc.No voy a resumir mucho o esto sería muy fomeque.
Las cosas que había que hacer ahí era reponer los dvd en la carátula que correspondía, ayudar a la gentecita a encontrar una película, ordenar los dulces y reponerlos, limpiar la tienda, limpiar los baños… toda esa pega pajera que, la verdad, a mi me gustaba.
Me enseñaron caja para atender a la clientela y ahí se aprende otras cosas.
Anécdotas:
Entre las que me alegraban la tarde noche estaban:
-Llegaba cierta clientela a arrendar. Entraban con la pareja, paseaban por los pasillos pensando cual sería la mejor película para pasar el rato, besitos por aqui, una peleita a veces, elegían el cocaví y llegaban a la caja. “Señora, su cuenta está bloqueada por no pago” miraba al pololo, que normalmente se cagaba de la risa, daba su cuenta y también estaba bloqueada, y se resignaba y preguntaba cuanto era. A veces eran 1500 pesos, pero los pocos que superaban las cinco lucas, tiraban todo lo más desordenado posible en plan “Mírame, tengo quince años y te jodo la vida como me la estás jodiendo a mi” y se iban enojados. Ellos se quedaban sin el panorama, yo ordenaba y continuaba con mi vida.
-Había niñas que iban en patota, grupitos de cinco normalmente a arrendar películas de terror máximo para ver en la pijamada que estaban organizando (porque digamoslo, siempre llegaban pasadas las ocho de un viernes). Llegaban a la caja, supongo que pensaban que esto era un cine y necesitaban ser mayores de catorce así que mandaban a hablar a la que se veía mas grande y daban la cuenta del papá. “Niñas, no las tienen de adicionales para arrendar en este local”. En el noventa… no, mentira, cien por ciento de los casos, la mamá estaba afuera esperando en el auto. Nunca entendí si era para que las niñas fueran mas independientes o por soberana paja porque hacía frío. Era lindo ver como la mamá se tenía que bajar del auto super contenta retando al aire porque nunca retaba a las niñas pero tampoco me tiraba todo el moco a mi. Arrendaba y mandaba al marido a dejar la película para poner de adicional a las niñas.
-Conocí a tres famosos no tan famosos pero que fue lindo verlos en persona. El sr Ricarte Soto, quien buscaba cine arte, Mariana Derderian que andaba con un super gorro porque la podían pillar por Floribella las niñas que andaban por ahí y a Daniela Campos, que entró con unos lentes de sol del tamaño de su cara clamando por ayuda porque era ella y no veia nada. Nadie mas la cachó. #SuperSad
-Conocí a tres amiguitos que conservo hasta el día de hoy y que todavía los quiero musho <3 #MomentoEmotivo
-Cierto día de mucha gente en la tienda, entró una vieja con cara de lanza MÁXIMA. Mi compañera le fue a poner ojo porque se fue directo a robar blurays nuevecitos. Yo me quedé atendiendo caja y llegó al lado mío la vieja y me dice *pone su voz mas lanza posible* “¿que me mandai a vigilar voh? si quiero te robo todas las cagá de películas...” *cierro voz de flite* entre otras cosas, así que la eché y seguí atendiendo a un cliente. Al segundo el caballero me dice “oye, te están robando los dulces” y miro y era la vieja caca que se estaba robando unos chicles. No se que cara puse, ni el acento de mi voz, ni ninguna cosa, pero la tipa se apuró a salir y la agarré de la ropa del hombro diciéndole que me entregara las cosas. Puta que tenía fuerza la señora… Pero mi ira tenía más, asi que no la solté y hablaba la típica *voz de flite de nuevo* “Sueeltame qliá, te saco la cuchilla y shao” *fin y no mas* pero nunca había escuchado a un flaite asustando en vivo. La tipa tenía susto. Como no la solté, se tironéo tanto que se le rompió el tirante del sosten y le quedó grande la polera. La gente miraba adentro y no hacía nada. Mi compañera salió y me dijo “Suéltala” y la vieja salió corriendo, se subio a un taxi que la estaba esperando y se fue. Entré enojada porque se fue la vieja, me fui al baño, me mire al espejo y mi cabeza empezó a pensar de nuevo. Se fue la adrenalina, empecé a temblar, me miré y dije “WEON QUE HICISTE COMO SE TE OCURRE ERAN UNOS CHICLES CACA”. Salí lo mas digna posible y el caballero seguía ahí esperando a que lo atendieran, fue muy sweet esperarme de su parte (porque si, me esperó a que me calmara) y me dijo que me había arriesgado mucho y me miraba asi como incrédulo. ¿En serio tengo pinta de no tirar un buen cacho?
La pega no era difícil. Era simpaticón el mundo de la pega part time que nadie quiere pero que es bacán igual porque me daban películas gratis todos los días que veía sagradamente obvio… (días después o nunca pero que aun las conservo gracias a programas maravillosos que encontré por ahi...) pero era agotador. Estudiar en las mañanas y trabajar en las tardes hasta las doce, una a veces, los sábados y domingos también, ver a mi hija poco y nada… Perderse muchos momentos… Todas esas cosas me hicieron aprender, no se que, pero aprendí algo, tuve experiencia.
Me ofrecieron crecer ahí, pero me rehusé. No quería crecer ahí, quería crecer en lo que me gustara de verdad o lo que estaba estudiando o ambas (cosa que hago ahora). Duré un año en ese trabajo. Me dolió dejarlo, pero me ofrecieron mi tercer trabajo top…


Que por supuesto les cuento en otra ocasión. Nos leemos pronto.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Diario de una Mamá Independiente VI: Trabajo Pt. 2

Top tres:

Antes de hacer oficial el hecho de trabajar en lo que estudié, entré a trabajar en tres lugares que me marcaron hasta el día de hoy.

Recién cumplida mi mayoría de edad, partí con toda la fe (y mucha vergüenza por ser mi primera vez buscando) a un conocido mall que hay cerca de mi hogar. Con más fe aún, pasé al cine.
Recién me estaba metiendo en el mundo del trabajo “oficial” (Al menos, para mi era oficial, banderear en la esquina o repartir volantes no [Perdón al que se sienta ofendido]) y estaba nerviosa. No tenía idea con quien hablar, las funciones ya habían empezado y el cine estaba vacío hasta en la boletería.
Me acerqué a confitería, donde no estoy segura si salió de la nada o estaba ahí MUY aburrido, un chiquillo que me dijo “Hola! ¿en qué te ayudo?” y le conté. Recibió mi currículum todo feliz y me recibió a mi igual de feliz cuando me contrataron.
Pero bueno, resulta que pasada una semana de eso, me llaman a una entrevista masiva. Nos metieron a una sala que era igual a una de premiere exclusiva, pero de mentira, con un proyector cagón para reuniones de oficina probablemente o capacitaciones o entrevistas masivas. Éramos como… seis personas, todas separadas por elección propia, hasta que entró la jefa de recursos.
Nos explicó la situación. Seguridad, en que podíamos trabajar, que no nos entusiasmáramos que lo más probable es que termináramos barriendo salas el resto de nuestras vidas… pero en un tono educado y amable con una sonrisa en los labios, así que sonaba hermoso igual.
No tengo absoluta idea del porqué, pero una semana después me informaron que había sido seleccionada como cajera part time. CAJERA POS, todo un lujo. Te pagaban bono por caja, te daban cabritas gratis, entradas todas las semanas… Por el módico precio de dedicar tus horas a lidiar con “¿Qué me recomienda usted?”, abuelitas con sencillo y niños haciéndose pasar por mayores de edad para entrar a ver películas “prohibidas” como The Spirit.
No crean que fue tan malo como suena, al contrario, me encantaba interactuar con el público. Con el tiempo me he puesto más autista, pero la paciencia era mi amigo mas fiel.
Por mi entusiasmo, me gané el derecho de subir de nivel y ser proyeccionista. Aluciné.
Entré en la sala común de las máquinas y… me desilusione un poco, pero me duró nada, hasta que me sentí importante. Me enseñaron a armar películas de rollo, moverlas entre máquinas, acoplarlas a las máquinas, todo a la relativa antigua. La bacán era la recién llegada máquina de 3D, donde la única película que había era Coraline, que se demoró una noche en traspasarse al equipo porque era una película muy pesada. Pero aún así, yo amé el hecho de poder interactuar con el cine, interactuar con la copia física de la película, probar películas sola, verlas, escuchar el “tacatacataca” de los cuadros al pasar para formar una imágen en movimiento.
Yo ya había tenido dos acercamientos al audiovisual, uno con mi profesora de Filosofía, quien nos mostró un mundo de películas de culto medio raras que me vienen hasta ahora y el segundo con el sr Salfate, mostrando películas, series y cortometrajes que deberías ver en la tele. Pero esto me llevó a otro nivel. Yo quería estudiar Cine. Quería armar películas…
Sueño que aún no se hace realidad, pero algún día filmaré algo…
Todo este sueño duró tres meses. Me retiré por lo que ahora llamo una estupidez de la que no hablaré, pero creo que es una de las cosas de las que me arrepiento de haber dejado.
Anécdotas:
-En esa época se estrenó “Mamma Mía”, una película de Meryl Streep en la que cuentan una historia y las mezclan con canciones de Abba. Resulta que una señora fue, desde el estreno hasta que sacaron la película de cartelera, TODOS los días y sola. Siempre decía el mismo comentario “Es que es tan buena y tengo tanto tiempo que hay que venir a verla”. Después de eso, fue poco.
-Uno de los guardias me enseñó a usar gratis las máquinas de masaje. No lo revelaré, pero tampoco lo usé mucho porque no me gustan los masajes.
-Vi como 4 películas en total. Debí ver más.
-Cerca de mi paso a proyección, llegó la película “El curioso caso de Benjamin Button”. No me acuerdo bien si eran como 6 o 9 rollos porque no me recuerdo cuantos minutos hace cada pequeño rollo que hay que unir para formar el gran rollo, pero al terminarla era enorme. Los platos donde colocaban las películas eran más o menos como una mesa de comedor para 4 (ahora, yo soy pequeña, pudo ser uno para dos, pero era grande) y ésta, llenaba el plato.
Resulta que la probamos, la vimos todos los que estábamos ahí (proyectores, cajeros, confiteros, quien quisiera), lloramos y al momento de los créditos tratamos de adelantarla… ERROR. Se desarmó el rollo. me quedé hasta como las cuatro am ayudando a los chiquillos a armarla antes de que me dijeran “vete no mas, aquí seguimos”. Horrible.
-Proyectamos “The Spirit” en la función nocturna, de 10 a 12 aproximadamente. Como no era una película popular, al asomarte por la ventanita te encontrabas con unas ocho personas, cuatro de ellas como pareja para besuquearse un rato. Nos quedamos conversando para que terminara el turno cuando casi al final se escucha un PAAH… Fuimos revisando y resulta que cuando quedaban unos 10 minutos de película, la máquina se sobrecalentó por un error capa ocho y se apagó la película… Los que no fueron en pareja pidieron la devolución del dinero porque no alcanzaron a ver el final.
-Me enseñaron bien el oficio de proyeccionista y lo que no sabía, lo preguntaba. Resulta que cada cambio de rollo, en la esquina superior derecha aparecía una pelota… Ostras, no se como explicarme, pero se notaba asi como “Toc”, una pelota en la esquina con unos puntos y cambiaba de escena medio brusco. Hace un año o más, me di cuenta que ya no existía ese cambio. Me dio pena imaginar que ya no existía el hecho de armar rollos, acoplarlos a la máquina… Todo es digital.

Cuando me fui, me regalaron una super mega bolsa de cabritas y un cartel, de esos gigantes que se cuelgan, del ratón Despereaux.
Fue una linda experiencia.


El siguiente lo encuentras en el próximo blog ;)
Nos leemos pronto.

viernes, 4 de diciembre de 2015

El Discman de la Caro II: Muse

Esta semana, la pasada y la pasada y la anterior a esa… y todas desde un mes antes del concierto que hicieron en Chile y aún más después del concierto, mi cabeza sólo quiere Muse en el cuerpo.
Desde el 94, Matthew Bellamy, Christopher Wolstenholme y Dominic Howard se lucen creando maravillosas canciones que tratan de diferentes temas. El tremendo vozarrón de Matt, su cabeza llena de ideas... Ostras, podría largarme a decir maravillas pero no.
Esta vez comparto mi setlist de canciones que grabaría feliz en un cd, asi que pongale play aquí y disfrute (Dedicado en parte a una nueva amiga que me cae lindo <3):


1.- Resistance (The Resistance) (00:00 - 05:47): La introducción misteriosa que tiene esta canción, te emociona. Por eso como primera canción, ya que entra como que no entiendes de que viene el disco cuando de pronto pah, pianito exclusivo.


2.- New Born (Origin of Symmetry) (05:47 - 11:49): Que decir. Nuevamente empezando por la intro en piano, la mezcla posterior con el rock de la guitarra, bajo y batería, te introduce en el mundo Muse.


3.- Time is Running Out (Absolution) (11:49 - 15:45): Una canción de amor disfrazada de amor psicótico. Love it.


4.- Uprising (The Resistance) (15:45 - 20:51): El video de esta canción de por sí es extraño y apocaliptico. Yo preferiría una marcha eterna con Matt adelante cantando, tocando puertas que todos salgan cantando detrás de él pidiendo por una revolución. Grande Uprising.


5.- Starlight (Black Holes and Revelations) (20:51 - 24:50): Una canción triste mezclada con música linda de comercial (cosa que supongo han hecho bastante). Disfrutad de la posible alegría que les pueda provocar la melodía, incluso tomenla como algo lindo. Not.


6.- Stockholm Syndrome (Absolution) (24:50 - 29:48): Demencia. Cuando me sale la canción en el discman actualizado conocido como celular con reproductor solo me imagino demencia hasta que llega el coro. Ahi te iluminas, subes al cielo un rato y bajas bruscamente a la demencia. Hermoso.


7.- JFK/Defector (Drones) (29:48 - 35:15): Free… yeah I’m free. La verdad es que gusta como lleva la canción para una nueva rebeldía junto con uprising. Algo asi como para cantárselo a la gente con algún tipo de poder.


8.- Map of the Problematique (Black Holes and Revelations) (35:15 - 39:33): Para variar, una intro deliciosa con gustito a serie policiaca tipo NCIS. Expresa todo lo que es ansiedad, si te pones ansioso fácilmente, no la escuches (aunque si, dale no mas, vale la pena).


9.- Madness (The 2nd Law) (39:33 - 44:12): La confusión propia de la adolescencia. Eso es para mi esta canción. La revolución personal, la explicación a los cambios de humor, el cambio de vida, etc.


10.- Exogenesis: Symphony Pt 1, 2 y 3 (The Resistance) (44:12 - 57:04): Inspiración para hacer un video del futuro en un… 300%. Interestellar reducido en una canción perfecta lleno de una sincronía entre el rock y la música clásica con la voz de Matt de fondo. Uf, perfecta.


11.- The 2nd Law: Unsustainable (The 2nd Law) (57:04 - 60:52): Siguiendo con la línea futurista, pero sinceramente, mas ambientado en la realidad actual, la canción nos muestra como decaemos lentamente para llegar a la canción anterior. Todo como crítica construida en un dubstep.


12.- The Handler (Drones) (60:52 - 66:19): Futuro lejano. Nos invadieron los robots, yo soy uno, oh wait. Ahora mismo lo soy con la rutina que tengo. Analogías de vida, tómeselo como quiera, la canción está muy muy buena.


13.- Unintended (Showbiz) (66:19 - 70:16): Caemos rápidamente a cortarnos todos las venas. El video en cámara lenta mostrando la confusión interna que no nos deja avanzar en la vida, pero con todas las ganas de querer hacerlo. ¿Preparó su gilette?


14.- Supermassive Black Hole (Black Holes and Revelations) (70:16 - 73:45): *Pesco mi moto invisible, paseo por la ciudad, atrapo a los malos con estilo escuchando esta canción*. Ya dibujaré bacán para hacer este video *Inserte aquí cara soñadora*.


15.- Knights of Cydonia (Black Holes and Revelations) (73:45 - 79:51): Para terminar como terminan los grandes. Se cierra el disco con una canción que nos lleva al viejo oeste y montamos nuestro caballo como malhechores, con el pañuelo en la boca robando mujeres… ok no.


Apocalypse Please, Mercy, Plug in Baby… cuantas canciones lindas quedaron afuera, pero yo creo que incluso puede que les reclame que no puede grabar el disco pirata porque está muy justo o se pasó dependiendo de la versión pirata que haya bajado.
PERO ACÁ NO FOMENTAMOS LA PIRATERIA (no, mentira)


Nos leemos :)

miércoles, 12 de agosto de 2015

Diario de una Mamá Independiente VI: Trabajo Pt. 1

Hace tiempo en Twitter, andaba circulando un Hashtag increíble, de esos que hacen soñar a muchos chilenos con ganarse un premio. Este en particular era por ser un trabajador “esforzado”. El hashtag era #FARKASDIADELTRABAJADOR en el que, si el reconocido señor Leonardo Farkas aprecia tus 140 caracteres para decir “Si, tu eres uno de los 10 trabajadores más esforzados”, te llevas nada mas y nada menos que 5 millones de pesos. Obviamente, no había jurado de por medio y supongo que fue mas bien por la mayor cantidad de gente compartiendo su historia. Uno de los que ganó fue un tipo en silla de ruedas que circuló hasta en las noticias por barrer las afueras de un hospital.

Había visto muchas historias, pero NADA como lo que se vivió en ese hashtag. Había mamás diciendo “Mi hijo trabaja todos los días por intentar volver a caminar” o “Soy mamá 24/7 y es el mejor trabajo del mundo”...
Señor Farkas, no creo que me lea. Igual le digo que se agradece su esfuerzo, como siempre, pero la verdad es que ni ud ni nadie puede decidir quien es mejor trabajador que quien. Hay gente que no lleva nada trabajando y no por eso, es un mal trabajador, todo lo contrario. Ese tipo del mcdonalds que está 12 horas parado detrás del mostrador y lleva un mes trabajando para costearse sus estudios lo puede hacer igual de bien que alguien que lleva 40 años en el mismo puesto de trabajo para costear a su familia. Todo viene con las ganas y la manera de llevar tu trabajo, en ambos casos, los dos se están esforzando, arriesgando horas de sueño, de tiempo compartido con su familia, etc.

Pero bueeeno, para que estamos con cosas, todos queríamos la plata. No participé al respecto porque no quiero ganar llorando con 140 caracteres diciendo "Soy una madre orgullosa, trabajadora y estudiosa" y, para que no se malinterprete, tampoco voy a llorar con una entrada de blog con el que doy a conocer mis experiencias. Pero si así fuera, no diría que el premio lo regalaré a los más necesitados (aunque si le daría unas lucas a la viejita que se duerme a la entrada del metro o a los que cantan choro en la micro)…

Bueno, me desvié ¿A qué viene todo esto?

Me llevó a rememorar mi corta vida de trabajo, pero que ha sido bastante larga para mi feliz afp, considerando que hay otros que no trabajan ni cuando salen de la universidad o que trabajan menos de un mes para irse de vacaciones, y tienen el descaro de poner en el currículum que son especialistas “Surfeando” (si, créanme, me tocó leer eso).

Primera Pega:

Cuando yo tenía sweet sixteens, un amigo trabajaba para Sodexho en la Clínica Alemana. Él me dijo “Están buscando gente part time, ¿Te tinca?” y yo así… “Ya :D”
En ese tiempo sabía que era raro que contrataran a alguien menor de dieciocho, sobre todo en una empresa así, pero fui igual.
Llegué en mi bici verde, de la cual hablé en otra ocasión anterior. La anduve trayendo por muchas partes de la clínica hasta que el guardia me dijo “Hay un estacionamiento afuera en el segundo piso del estacionamiento de autos”. Bueh, ahí partí a dejarla (que por cierto era un estacionamiento muy chuño) y empecé a buscar el lugar. Terminé hablando con el mismo guardia para preguntarle donde estaba Sodexho y no sabía… Asi que me di vueltas otra vez por todos los lugares posibles del edificio, pensando "Oh, hermoso, lleno de luz y pureza", hasta que en informaciones me vieron perdida y me mandaron al subterráneo. Ahí estaba el casino y una mini oficina que no tenía ni ventanas. Me encontré con mi amigo y con una chiquilla (que por cierto, mantengo contacto con ella hasta hoy <3) y las dos hicimos entrevista. Quedé ingresando facturas los sábados en la mañana ganando "buenas lucas" que me valieron para comprarme mi camarita de video, con la que pasé muchas aventuras que no contaré ahora.
Igual la pasé super bien, aprendí harto excel y de repente me llevaban galletitas de colación de lo que iba entrando. Los que trabajaban ahí se portaban super bien conmigo, supongo que era porque estaba chica y si los veo en la calle alguna vez, los saludaré (pero sólo si me reconocen, porque de lo contrario... #MalaMujer)
Si… muy grato…

Aprendiendo el “No More”:

Mi papá siempre me dijo "El día que trabajes, tienes que hacerlo bien, no importa lo que sea. Si barres la cocina, tienes que ser la mejor barriendo la cocina". Con estas pegas, lo intenté, pero antes de faltar a lo que me dijo mi viejo, me retiré dignamente como la mejor en mi pega (con el ego entre las nubes, pero no era mucho que decir con las pegas de mierda que fueron...)

Mis compañeras de curso se juntaron a banderear por campañas electorales. Tiempo después me invitaron a participar para ganar unas lucas (bien cacas las lucas eso si y nos daban un juguito en caja con un galletón DE ALMUERZO) pero como ellas ya tenían el grupo formado, siempre terminaba bandereando en una esquina forever alone o repartiendo volantes igual de alone.
Lo entrete que hice en esta pega, fue una cicletada por el candidato de ese entonces (y hasta ahora, como la mayoria de los políticos) que se hizo en un cerro cerca del mall sport. Partíamos desde la entrada del Mall, subíamos por una callecita estrecha, llegabamos a la mitad del cerro y nos daban un vasito con gatorade del tamaño de esos que te dan en el dentista. Ese vasito era de ese porte porque era la "porción ideal para la ocasión". Un huevo, para que chucha te venden la botella entonces. La subida fue una MIERDA. Como ya les conté antes, mi bici verde tenia los cambios malos, así que estaba en el más pesado. Imaginarán por qué fue una mierda la subida…Pero la bajada, fue casi como flotar con los dioses, pero ahora no la hago ni cagando.
Bueno, esa pega fue mala con ganas, la pase mal, ganaba ni para un combo de mcdonalds, asi q never more…
Pasó mucho tiempo antes que trabajara de nuevo en algo (un embarazo y como un año más). Postulé en el Mamma Mia que recién se había instalado en el Alto Las Condes. Debo decir que gracias a esto, aprendí que no quería trabajar en un Mall nunca más, menos en un restaurante de comida rápida. Resulta que entré como cajera part time, donde aprendí todo el trabajo de atención a cliente eficientemente, a la hora de almuerzo, llegaba mucha gente a pesar de que era de los locales nuevos que casi nadie iba, por lo que trataba de tener paciencia con aquellos que aún no habian decidido o me preguntaban a cada rato lo que era el plato... El problema de verdad era que cuando me apuraba para que todos tuvieran su orden más rápido, salían mas pedidos de los que podían atender y me pedían que parara un poco o la gente reclamaba si no tenía su pedido… Si paraba por eso, me retaban porque no estaba haciendo nada o iba muy lento... Hasta que lo mande al cuerno y atendí como yo quería, si no se podían la carga, no era mi puto problema. Aquí tambien una vez me cagaron con 50 lucas. Unas chiquillas del happyland (betches) llegaron a cambiarme unos billetes y cuando me propuse a contarlos, mi jefe me dijo “no las cuentes, total ya nos vamos” Error fatal… al día siguiente me putearon a mi, me defendí, tiré al agua a mi jefe y me retiré indignada.

Duré tres meses en ésto y no escupo al cielo, pero espero no volver en la vida a hacer una pega así y compadezco a los que tienen que pasar por estas pegas pq no pueden estudiar nada o algo que no tiene suficiente campo...

Otro día les hablo de mis mejores tiempos
Nos leemos pronto.

lunes, 6 de julio de 2015

Diario de una Mamá Independiente V: Embarazo Pt 2

Primera parte aqui: http://condensacionsincensura.blogspot.com/2015/06/diario-de-una-mama-independiente-v.html
Aquí sigue la historia. Tuve que dividirla en dos porque era muy larga. Resumir nueve meses en esto, no es nada...




Tercer Trimestre:


Yo, a pesar de todo, era una mujer feliz. Tenía una super guata. No tenía problemas para dormir, no se me hincharon los pies, no me cansaba de caminar mucho rato, me sentía guapa, le cantaba a mi hija, veía películas…
¿Envidia? Si. Yo no tuve malestares previos que me molestaran, mi único antojo era la Fanta y el pollo frito. Dejé de comer embutidos en general porque me volvía el asco (Hace poco fue que pude volver a comer choripanes). Y eso. En los últimos meses me dio por salir a todas partes. Mis vecinas me felicitaban, le deseaban salud a la guagua, etc.
Pero tenía una pena más. Ésta ya mas justificada. Cuando yo quedé embarazada, poco antes quizá, mi tío/primo favorito de siempre fue diagnosticado con cáncer de esófago. Vino a Santiago a tratarse, pero no estaba resultando. Poco antes de que lo mandaran al Norte, que es de donde venía, lo fui a ver mas o menos guatona para saludarlo. Él me tocó la guata y me dijo “Yo a esta guaguita no la voy a alcanzar a conocer, pero va a estar super bien y va a ser super sanita”. Yo le decía que no, que le iba a mandar fotos y todo eso, pero él sólo sonreía y me deseaba felicidad.
Resulta que él falleció, no recuerdo bien si fue 31 o 1°, y mi hija nació el 4, pero el día que me dijeron que lo estaban enterrando, yo empecé con mis dolores de parto. Casi nadie entiende que él para mi es su ángel de la guarda, que es su protector, que la cuida y es porque nadie estuvo conmigo cuando él me dijo todo eso. Efectivamente, no la alcanzó a conocer, pero está ahí siempre. Ella sabe que él es su ángel y le gusta. Es rico saber que hay alguien ahí. Yo tengo a mi abuela, quien no alcancé a conocer, pero estoy segura de que ella fue mi cuidadora.
Bueno el caso, viene lo feo.





Nacimiento:


Decir “parto” me carga. Curiosamente es una palabra muy fuerte, pero la encuentro un poco brígida, así que por eso esta parte no se llama así.
El día tres amanecí igual que los otros días. El almuerzo era jurel con puré, que no comí porque me causó asco y pasé un rato en el baño hasta que me di cuenta de que no era asco sino contracciones.
Llamé al sapu de emergencia, al cual se suponía que tenía que llamar en caso de, y le dije “Señorita, tengo dolores de espalda y debajo de la guata, tengo asda semanas” a lo que me contestó “Bien, ¿Ud es primeriza?”. Afirmé y ese fue mi error. Chiquillas, no digan sólo sí o no las toman en serio. Esta mujer me dijo “Ahh… es normal que se sienta asi, todas lo empiezan a sentir una semana antes o unos dias antes de que nazca la guagua, no se preocupe” y no hubo mas conversación. Cinco minutos después, le estaba pidiendo a la señora de mi primo que me fuera a buscar para que me llevara a la maternidad. Desde Vitacura hasta el hospital Luis Tisné, por Vespucio un miércoles a las 6 de la tarde. Háganse esa. Quizá la hacen y me entienden que había un taco de puta madre. Ella tocaba la bocina diciendo que me llevaba, parecía ambulancia. Algunos entendían y le abrían el paso, pero otros no y yo ya me quería morir. El dolor de espalda aumentaba y yo NO aguanto el dolor. ODIO el dolor, y no es ese disgusto de “A quien le gusta”, no, yo lo ODIO.
Llegamos allá. Maternidad en paro. Creo que había dos matronas, un doctor en camino y auxiliares que no eran de maternidad. Éramos como cinco chiquillas. Me metieron a una salita, me hicieron comer algo (yo no quería nada, pero igual me trajeron un super8 con jugo) y me dijeron “Ud no piensa estar dilatada así que váyase a caminar”. A CAMINAR WEON. caminaba de un lado para otro, ojos semicerrados, dolor de espalda a muerte. Me agachaba de repente y me hubiera tirado al suelo a hacerme bolita. Algunas enfermeras me miraban como “que exagerada la niñiita”. Yo empecé a acumular ira. No angustia ni dolor. Ira.
Me volvieron a examinar y me volvieron a decir “¿Ud es primeriza?”, asentí de nuevo, “Ahhhh entonces esto es una falsa alarma, le queda para rato así que vayase a su casa”. Con todo el amor posible ante mi ira acumulada le dije “Señorita, vivo en Vitacura, no me puedo ir porque no aguanto el cómo estoy”. Empecé a llorar. Cuando me enojo, me pongo a llorar. Póngale el dolor de espalda encima y fue peor. Así que “hicieron los trámites”, me dejaron sentada en la sala de espera MUCHO rato hasta que me trajeron una silla de ruedas. Le apreté la mano al que trajo la silla de ruedas y parece que le dolía porque me dijo “Mija, suélteme por favor”. Me hicieron firmar, no se que firmé, y mandaron a mi familia a la casa mientras a mi me mandaban como la alaraca del pre parto. Si, después supe que así me conocían.
Llegamos arriba, me dejaron en la puerta y me mandaron caminando con mi bolsito en la mano a la cama que estaba a la mierda. Creo que en el transcurso de caminar a la cama, caminar al baño a vestirme para dormir y volver a la cama se me fueron como veinte minutos. Una tortuga caminaba más que yo. Sentí envidia épica de ver a las mamás tan relucientes y felices, lo más probable con una epidural en la columna. Yo la pedía pero me miraban así como “Chiquitita, piensa que le vamos a poner algo”. Hasta que no alcancé a subirme a la cama cuando empecé a gritar. Se me rompió la bolsa y todas las mamás de la sala empezaron a tocar los timbres de alarma. Me sentí muy agradecida. Llegaron dos enfermeras y un auxiliar a subirme a la camilla, a la cual me tuve que subir sola o podía denunciarlas por maltrato (oh wait), me pusieron esa bata rancia de papel y yo gritaba. Al que me hablara, yo lo puteaba (De ahí el alaraca) y el auxiliar que me llevaba a la sala de parto me decía todo asustado “Por favor señora no vaya a tener la guagua aquí porque yo no soy enfermero” y lo puteaba de vuelta diciendole “Apúrate entonces pos WEON”.
Cuento corto, llegue a la sala, entró la matrona, entró mi ex y salió la guagua. Todo esto como en cinco minutos.
COMO describir el alivio. Cagar después de aguantarte todo el día es un cuarto de lo que se siente tener a la guagua. La matrona dijo “Puje” y salió. Me empecé a reir de puro alivio, el problema es que parecía loca de patio, carcajada limpia. Pusieron a mi hija en el regazo por lo del “apego”, pero yo solo me reía. Y apretaba las manillas de la camilla. Una enfermera empezó a soltarme los dedos a la fuerza para ponerme el suero y yo me volvía a agarrar. Absorbí como tres paquetitos de suero en un rato. Ya mas consciente del tema, me llevaron a post parto, me llevaron a mi hija y todo fue hermoso.
No tengo idea de que es lo que me pasa en la espalda, pero yo tengo los nervios tan sensibles, que si me meto a una piscina muy fría soy capaz de morir ahogada por no respirar de parálisis por los nervios. Las películas de suspenso, me ahogan. Ese día supe que podía gritar, y bastante fuerte por cierto, porque ante el pánico yo me retraigo y me ahogo. Pero supongo que por eso no aguantaba a la guagua adentro. El dolor de espalda me pateó por los dolores que no tuve a lo largo del embarazo.
Horrible.


Pero nació mi hija y fue todo muy hermoso. La cara de la gente cambió, mi hija era un sol, dormía de noche, comía a sus horas, lloraba poco y nada. Era una guagua envidiable. Me cambió la vida, mi manera de pensar, de ver las cosas, mi actitud, todo se adaptó. No se si nací para ser mamá, no me gustan mucho los niños, pero si me dijeran que todas las guaguas van a salir así, todas querríamos ser madres mucho más facil.
Yo por mi parte quedé con la guata arrugada como pasa, estrías en las piernas, etc, etc. Pero volví a mi peso original así que muy bien. Quedé friolenta a tal punto que le tengo que preguntar a mi hija si ella tiene frio porque o si no estaría con chaleco todo el día por mi culpa.
Aunque al día de hoy la veo y pienso que todo lo que he contado es sólo una anécdota, parte aprendizaje por si hay una próxima vez. La enfermera que me mandó para la casa me fue a ver y quedó para la escoba. Tantas ganas de decirle “Betch, viste, betch”, pero la ira se había ido dando paso a felicidad plena por un mes, mas o menos.
Ahí empezaron otras cosas, pero no serán contadas ahora.

Nos leemos luego.